Page 31 - Reflexiones sobre Ingeniería 2023D-2024

Revista de la Facultad de Ingeniería, Año 8, Número 1
tecnológico y/o la toma de decisiones autónoma (Bostrom, 2014; Russell & Norvig,
2016).
Las regulaciones o las leyes no son capaces de acompañar la velocidad en los avances
tecnológicos y en particular de las tecnologías emergentes, así como tampoco con
marcos de trabajo que brinden cierto grado de seguridad legal a la población. Los
organismos internacionales y/o los estados, que son quienes deben regular estas
tecnologías disruptivas, tienden a reaccionar de forma tardía y como consecuencia, las
leyes o regulaciones se crean de forma apresurada y normalmente, cuando la
tecnología ya se encuentra disponible y con acceso masivo por parte de la población,
como el caso de la inteligencia artificial.
Las alarmas se han activado con la popularización de la Inteligencia Artificial Generativa
(IAG), la IAG es una rama particular de la IA que consiste en la habilidad de la IA para
la generación de nuevo contenido, sea este texto, imágenes, videos o de cualquier otro
tipo. Es importante destacar que no es una tecnología nueva, pero los últimos avances
y mejoras hace que, en el último tiempo, haya concitado la atención global debido a
sus capacidades para generar contenido hiperrealista, así como también, componer
textos creativos casi a la par de su contraparte humana.
El potencial de esta tecnología consiste en que el usuario debe interactuar con la IAG
mediante el ingreso de un texto descriptivo, donde usando el lenguaje natural el
usuario describe que es lo que desea que la IA genere. En este escenario se observan
dos tipos de IA interactuando, la primera de ella es una IA enfocada al procesamiento
de lenguaje natural (PLN) donde se extrae los conceptos y la intención del usuario.
Posteriormente entra la segunda IA, la IAG, que es la encargada de generar el
contenido. Al texto que el usuario introduce se le denomina “prompt”

¿Qué son los prompt?

El correcto funcionamiento de la inteligencia artificial generativa depende de gran
medida de los denominados “prompt”. Los “prompt” son textos ingresados por el
usuario en forma de pregunta, instrucción o texto libre donde la inteligencia artificial
por detrás interpretará lo que el usuario ingresó (mediante algoritmos de
procesamiento de lenguaje natural) y devolverá una respuesta de acuerdo al tipo de IA
con la que estemos interactuando (texto, audio, imágenes, video, etc.).
La correcta creación del prompt es de vital importancia si queremos obtener una
respuesta acorde a nuestros intereses, y es por este motivo que en el último tiempo se
ha hablado de la necesidad de disponer o aprender una nueva habilidad denominada
“prompt engineer”, que no es otra cosa que formular el texto correcto para obtener la
respuesta adecuada. Si bien se ha llegado a considerar al prompt engineer como una
nueva disciplina o carrera de futuro, no parece ser un campo muy amplio sino por el
contrario, parece ser una habilidad adicional como en su momento fue aprender a
utilizar Word o Excel.

Inteligencia artificial generativa
Existen dos grandes ramas (aunque no son las únicas) de la IAG que han despertado
gran interés y cuyo uso se ha masificado en distintos estratos sociales. La primera de
ellas son las redes generativas antagónicas o adversarias (GANs), mientras que las
segundas consisten en los modelos GPT (Generative Pre-Trained Transformers).

Las GANs se destacan por crear contenido multimedia (principalmente imágenes) y
consisten en dos redes neuronales que “compiten” entre sí, donde una de las redes
crea imágenes y otra red discriminadora evalúa si la creación es real o generada; cada
vez que la imagen es rechazada (por clasificarse por generada) la red crea una nueva
imagen. Este ciclo es iterativo y continua hasta que la red generativa crea una imagen

29